El enigma de las luces y drones sobre Nueva Jersey: ¿Qué sabemos hasta ahora?

Avistamientos de miles de drones en Nueva Jersey generan controversia política y respuestas oficiales ambiguas mientras miles de reportes mantienen en alerta a Estados Unidos.

En las últimas semanas, el espacio aéreo de Nueva Jersey y la costa este de Estados Unidos ha sido escenario de un fenómeno desconcertante: una serie de drones no identificados ha sobrevolado repetidamente áreas sensibles, incluido el Picatinny Arsenal y el campo de golf del virtual presidente electo Donald Trump en Bedminster. Aunque las autoridades han asegurado que estos dispositivos no representan una amenaza, la incertidumbre sigue generando controversia política y temor en la población.

El gobernador de Nueva Jersey, Phil Murphy, junto con el senador Andy Kim, han intensificado las investigaciones en colaboración con el FBI, el Departamento de Seguridad Nacional (DHS) y la policía estatal. A pesar del despliegue de tecnología avanzada, los resultados hasta ahora han sido escasos.

“Los equipos federales son potentes, pueden mitigar drones, pero eso no está permitido actualmente en suelo estadounidense”, afirmó Murphy, quien también ha urgido al Congreso a otorgar mayor autoridad a los estados para enfrentar este tipo de amenazas.

• Presión política: “¡Derríbenlos!”

Mientras el gobierno federal, a través del portavoz de seguridad nacional John Kirby, enfatiza que los drones “operan legalmente” y podrían ser incluso simples aeronaves recreativas, las críticas no han cesado. Donald Trump y otros legisladores exigen acciones contundentes.

Trump, en su plataforma Truth Social, fue tajante: “Informen al público o derríbenlos”. Legisladores como Richard Blumenthal y Chris Smith han coincidido en la necesidad de derribar al menos uno de estos dispositivos para esclarecer su origen. Smith incluso sugirió que detrás de las maniobras evasivas podría estar una potencia extranjera como Rusia, China, Irán o Corea del Norte.

• Miles de reportes y el eco del caso 2024

La tensión actual recuerda los incidentes de enero de 2024, cuando una oleada similar de avistamientos de drones en el espacio aéreo restringido de Colorado y Nueva Jersey generó alarma pública. En aquella ocasión, más de 6 mil informes inundaron al FBI, pero las investigaciones concluyeron sin hallazgos concluyentes, atribuyendo los vuelos a dispositivos recreativos y comerciales.

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Hoy, el escenario es similar: el FBI ha recibido más de 5 mil reportes en pocas semanas, de los cuales solo 100 han sido considerados lo suficientemente creíbles para ser investigados.

“¿Por qué no podemos atrapar al menos uno de estos drones y llegar al fondo del asunto?”, cuestionó Chris Smith el sábado, reflejando la frustración de muchos estadounidenses.

• ¿Amenaza real o paranoia colectiva?

La especulación en redes sociales ha alimentado teorías de conspiración, desde operaciones de espionaje extranjeras hasta pruebas tecnológicas clandestinas. Sin embargo, el Pentágono y el DHS insisten en que no existe evidencia de riesgo para la seguridad nacional.

El portavoz del Pentágono, Pat Ryder, minimizó la teoría de inteligencia militar al señalar que los drones reportados son demasiado ruidosos y visibles. “Con más de un millón de drones registrados y miles en vuelo diario, debemos distinguir entre lo extraordinario y lo ordinario”, explicó Ryder.

• ¿Mensajeros celestiales o tecnología de otros mundos?

En medio de la oscuridad, destellos luminosos irrumpen con movimientos imposibles de explicar. Algunos aseguran haber visto figuras etéreas, como ángeles que descienden entre las sombras, portando una luz que desafía toda lógica. Otros, más inclinados hacia lo terrenal —o quizás lo extraterrestre—, sostienen que se trata de UAPs, objetos de origen desconocido que podrían ser pruebas de tecnología avanzada, ajena a nuestro planeta.

Mientras los cielos de Nueva Jersey continúan siendo testigos de estas manifestaciones, las interpretaciones oscilan entre la fe y la ciencia, dejando a la humanidad atrapada en un dilema que no termina de resolverse: ¿mensajeros celestiales o visitantes de otro mundo?