El Paraíso de Adán... NATURALEZA PECAMINOSA

19 Ago 2025

Adán, es el primer hombre creado por Dios y, junto a Eva, es considerado el padre de toda la humanidad, describe el libro del Génesis de la Biblia.

El otro Adán, el enamorado, es el ´hermano´ incómodo de AMLO; ambos originarios de Tabasco y de familias muy vinculadas.

Bajo la sombra del macuspano, Adán, el Terrenal, ocupó cargos importantes como la gubernatura de su estado y la secretaría de Gobernación; hoy día es senador de la república en condiciones muy complicadas, por presuntos nexos con el crimen organizado.

Adán y Eva desobedecieron a Dios, al comer del árbol prohibido lo que se conoce como pecado original.

Por culpa de este Adán, todos los seres humanos han heredado una naturaleza pecaminosa.

Siendo AMLO presidente, convocó a su paisano y pariente a integrarse al gabinete; en octubre de 2022 lo blindó con tres recursos:

1. La certificación personal: ´lo conozco bien, es honesto, es mi hermano´. Esto convirtió la confianza presidencial en aval, pero también en un riesgo. Si el aval se derrumbaba, el golpe no solo era para Adán, sino también para quien lo otorgó.

Este mensaje, visto con la perspectiva de que hoy Adán Augusto está ´contra pared´ y exhibido por el propio gobierno, refleja un antagonismo que golpea directamente a la narrativa presidencial.

2. La descalificación del mensajero por este nombramiento, fue culpar a la ´prensa conservadora´ y hasta señalar a la revista Proceso como parte de una campaña perversa.

Fue una estrategia política clásica para cerrar filas, pero si la información crítica termina confirmándose desde adentro, esa narrativa cambia a un bumerán: ya no es la prensa ´enemiga´ la que cuestiona, sino el propio aparato gubernamental.

3. La apelación a principios y símbolos fue citar a Benito Juárez, y reforzar el lema ´no mentir, no robar y no traicionar´, que pretendió elevar el debate al terreno moral.

El problema es que, cuando un aliado es reprendido por el mismo gobierno, esos principios exigen actuar sin contemplaciones, porque si no se transforman en retóricas huecas.

En síntesis, lo que en octubre de 2022 se presentó como defensa cerrada, hoy se lee como un testimonio de lealtad personal, por encima del escrutinio.

Si el propio gobierno descalifica al Adán del Edén, la congruencia política y moral demanda que el expresidente sustente el estándar que proclamó.

De lo contrario, el episodio se tropieza y cae en un paradigma de cómo un discurso de principios puede estrellarse contra la realidad.

Y por culpa del aún Adán senador, algunos militantes de la 4T podrían estar salpicados de actividades pecaminosas, como el otro Adán, el de la sagrada escritura que se comió lo que no debió comerse.