Octavio Romero Oropeza, el agrónomo impuesto por Obrador como director en Pemex, está convertido en el delincuente más famoso que haya tenido esa empresa en toda su historia.

Octavio Romero Oropeza, el agrónomo impuesto por Obrador como director en Pemex, está convertido en el delincuente más famoso que haya tenido esa empresa en toda su historia.

Los cuerpos de seguridad federales, han decomisado más de 30 millones de litros de petróleo, diésel y gasolina, como producto del huachicol, pero Romero Oropeza nunca supo, ni vio nada.

Hasta una refinería clandestina se descubrió que operaba mucho mejor que la de Dos Bocas, pero Octavio Romero, así como ningún otro funcionario de Pemex, nunca se enteraron absolutamente de nada.

Ahora, en el colmo de los colmos, el Departamento de Justicia de los Estados Unidos, le da una reverenda balconeada a Octavio Romero Oropeza y con ello a Obrador, al informar que dos empresarios residentes en Texas, se beneficiaron con contratos de Pemex, a través de sobornos en efectivo, relojes y bolsos marca Louis Vuitton.

Uno de esos empresarios, coincidentemente, es tabasqueño, igual que Romero Oropeza.

Los empresarios acusados son, Mario Alberto Ávila Lizárraga y Ramón Alexander Rovirosa Martínez, ambos mexicanos, residentes en Texas.

A través de textos y audios obtenidos por el FBI, se pudo conocer que los mencionados empresarios sobornaron con 150 mil dólares a tres funcionarios de Pemex, para manipular los procedimientos de licitación y asegurar millones de dólares a través de contratos.

El tabasqueño Ramón Alexander Rovirosa figura como propietario de empresas como Tubular Technology y Energy On Shore, ambas con sede en Tabasco.

Es fundador y director de la empresa Roma Energy, una compañía de exploración y producción de petróleo y gas con sede en Texas.

Entre 2019 y 2021, Pemex Exploración y Producción (PEP) entregó contratos por más de 82 millones de pesos a empresas de Rovirosa. Imagínense como estubo el moche.

A Rovirosa, se le asocia con otro empresario tabasqueño, Omar Vargas, investigado por defraudar a Pemex, mediante empresas fachada, una de ellas, establecida por la notaría de Adán Augusto López Hernández.

A Rovirosa se le acusa además, de tener vínculos con cárteles mexicanos al igual que Adán Augusto López Hernández.

Que bonita familia morenista, el que no es narco es ratero¡¡